Does the little princess want to play? | Katherine Newman

Me había enterado que mi pequeña Katherine había vuelto al hotel con sus padres. Es extraño nunca pensé que tendría una ahijada, pero al parecer con la pequeña habíamos hecho una conexión magnifica. Mas aun cuando ella es un a hechicera que controla el fuego como lo hacia yo. La familia Newman no era muy amiga de la familia LeBlanc, pero cuando la pequeña nació y con aquel don me ofrecí para ayudarle… pero después de mi accidente las cosas cambiaron para mi, y no la había visto en mucho tiempo. Pero ahora que se que me puedo controlar tengo la esperanza que puedo estar a su lado sin problema.

Admito que estoy un poco nerviosa, al fin y al cabo necesito aprender a controlarme, todo aun e s muy reciente, pero el amor que le tengo a esa chica se que sobrepasara todos los impulsos de sed que podría tener por ella. Es como Vladimir que su sangre no me ínsita a que la beba. Doy un suspiro antes de salir de mi habitación y tocar la puerta de al lado, donde se hospeda Katherine. Espero impaciente a que me abra la pequeña para poder ir a pasear al laberinto, no es la idea que nos quedemos encerradas en un hermoso día nublado. Para mi suerte no era un día con un sol radiante, por lo que puedo salir sin problemas al exterior sin sentir esa molesta sensación de quemadura.

-¿Esta por acá la pequeña Kath?- digo de manera de juego hacia la puerta esperando que la hechicera reconozca mi voz y abra la puerta, que sepa que no soy un extraño… aunque luzca un poco mas pálida de lo normal.

Este día era sin duda uno de los mejores, ya que hace poco que llegue al hotel y de lo poco que lo he visto ya me di cuenta de lo increíble que es, sin duda. Hace poco tiempo me entere de que mi madrina Mía estaba aquí en este hotel, después de tanto tiempo sin verla nos volvemos a reencontrar, ademas que lo mejor es que su habitación es justo al lado de la que yo me hospedo.

Ahora me encuentro en mi habitación, mirando televisión esperando a que mis padres se desocuparan para poder ver tele juntos, ya que no pasamos mucho tiempo juntos que digamos, ya que ellos siempre trabajan y yo estoy en la escuela o con la niñera pero después de todo estamos en el hotel y tengo todo los días para estar con ellos.

Me levante de la cama para ir a buscar un vaso de agua pero escuche una voz en la puerta, me resultaba conocida como si la hubiese escuchado de antes y es así reconozco esa voz donde sea, es la de mi madrina imposible olvidar la voz de una de las personas que mas quiero. Sonreí al escucharle mencionar mi nombre o mejor dicho mi apodo y con esa misma sonrisa abrí la puerta - - Hola - dije mientras salia una sonrisa de mi rostro, ya que después de tanto tiempo nos volvemos a ver.

Se que estoy un poco nerviosa al ver a la pequeña Katherine nuevamente, ha pasado mucho desde la ultima vez que nos vimos, incluyendo mi transformación. Nervios sobre si me reconocerá con el nuevo tono de piel, o si podre controlar mis impulsos sobre ella. Muchas cosas que pasan por mi cabeza antes de ver como la puerta se abre para encontrarme con una pequeña rubia que abre la puerta.

¿Cómo estas mi pequeña Kathy?– le pregunto sonriendo antes de tomarle en brazos y abrazarla, olvidando todos los temores y nervios que tenia, se podía ver que ella también me reconocía por lo que al menos mi transformación no afecto mi apariencia física, por mas que Vladimir digiera lo contrario, supongo que el no es un punto de comparación. - Venga princesa, hable con tus papas y me dieron el permiso para que salgamos las dos ¿vienes?- le pregunto hincándome a su altura con entusiasmo, quizás no era un bello dia soleado pero si era un día nublado perfecto para alguien como yo para poder salir al laberinto y no sufrir las consecuencias del sol.

Todavía no puedo creerlo ¿enserio es ella? luego de tanto tiempo vuelvo a verla, sin duda es lo mejor. Estoy mas que emocionada espero pasar todo un día largo con ella porque nos volvemos a reencontrar y es algo muy feliz para mi. Tengo ganas de saltar por todos lados pero para ocultar mi emoción simplemente sonrío y no mas. Me emociono con la pregunta que ella hizo preguntándome como estoy, estoy mas que bien súper contenta. - Muy contenta - dije contestando a su pregunta.

Es increíble volverla a ver, aun no puedo creerlo sin duda es lo mejor. Me siento muy segura cuando estoy con ella, aunque también insegura ya que tengo miedo de estropearlo con respecto a mi fuego. Pero como mi mamá dice debo estar relajada sin preocupaciones, pero no puedo. Soy nueva en esto y me asusta mucho mas para una niña como yo, que tiene la capacidad de manejar el fuego.

Escucho cuando me dice que mis padres le dieron permiso para salir las dos, lo menos que puedo hacer es sonreír sin dudarlo ya que tenemos tiempo sin pasar un día las dos, veo que se agacha de mi tamaño para preguntarme se iré y obviamente mi respuesta sera que si - Si, siiiii - digo con felicidad y emocionada de poder salir con ella.

Mi pequeña ahijada es la luz de mi vida, me deja claro que podemos estar juntas como si nada. Olvidando mis problemas como lo es la sangre o la sed que tengo. Con ella desde que la vi, olvide todos mis problemas, como si la vieja Mia estuviera acá sin problemas algunos, los normales que antes tenia sobre el fuego esas cosas. Sonrio al ver como me dice que esta muy contenta lo que me satisface.- Me alegro mi pequeña, debes dejar de crecer - le digo sonriendo con una sonrisa que no se me veía en esos días.

Me alegra estar con ella, disfrutar con todo lo que es su infancia. Jugando con las bolsa de fuego que ambas creábamos….pero ahora supongo que es diferente, no tengo ese poder, pero aun así podría ayudarle un poco pero ya las demostraciones acabarían.

¿Emocionada mi pequeña?- le pregunto antes de sonreírle.- Venga supongo que iras a asi? O te ayudo a cambiarte de ropa?- le pregunto emocionada por este dia de las dos, esta nublado y es algo perfecto para poder salir o al menos para un vampiro como yo.

- Yo ya no quiero crecer mas - dije sonriendo y mas feliz que nunca. Se siente muy lindo volver a verla una vez mas después de tanto tiempo. Debo admitirlo la extrañe bastante.

Espero poder disfrutar un poco mas con ella, ya que desde hace tiempo no nos vemos y ademas de que mis padres no están podemos pasar todo el día las dos. Esta ves espero poder estar relajada y sin miedo, para no estropearlo y arruinar algo gracias al fuego.

Asiento a su pregunta sobre si estaba emocionada y obviamente que lo estoy ya que tenemos meses, bueno quizás hasta años sin vernos. - Por supuesto - contesto a su pregunta con una sonrisa que nadie puede quitar y lo mejor emocionada posible. Me imagino que este día va a ser el mejor de todos sobre todo porque llevo ya casi cuatro días en el hotel y me encuentro con una sorpresa.

Mi madrina tiene razón no puedo ir así, tengo que cambiarme de ropa y que mejor asesora que ella - Ayúdame, sii - contesto muy emocionada aplaudiendo con mis pequeñas manitos.

Rio al escuchar a mi ahijada cuando me dice que no quiere crecer mas. Causa ternura, primera persona pequeña que escucho que no quiere crecer, es extraño y uno a mi edad lo único que quiere es tener la edad de ella. Nunca nos conformamos con lo que tenemos, pero al parecer la pequeña hechicera si lo hace, se conforma con lo que tiene en la vida.

Sonrió ampliamente cuando Kath dice que estaba emocionada por la salida que tenia preparada. Años que no nos vemos y creo que debemos ponernos al día, como el hecho que ya no soy una hechicera y ya no controlo el fuego. O quizás ella no se acuerde de ese detalle, pues dentro de todo es muy pequeña dentro de todo..- Me alegro- digo adentrándome a su habitación cuando me dice que si le ayudara a cambiarse ropa.

Entro a una habitación estándar, pero de las de mayor precio del hotel. Siempre los Newman buscando las mejores comodidades que hay en el hotel y obviamente mi familia, Demian, busca ayudarles al ser un buen amigo del padre de Kathy.- Venga vamos a escogerte unos pantalones y un poleron cómodo- digo tomando la mano de mi pequeña, sintiendo un calor que proviene de ella, lo que me hace sonreír con un poco de nostalgia, pero intento que no se me note del todo..- Tengo preparado un día de picnic en el laberinto para las dos- le comento dando la explicación por que debe ir con un poleron, dado que igual hace algo de frio y el sol no esta presente.

- Vamos - digo sonriendo y siguiéndola. Tanto tiempo sin verla, reconozco que al principio no la reconocí, es decir no sabia de quien era esa voz pero luego capte totalmente de quien se trataba. Y me alegra mucho volver a verla, no ha cambiado en nada. Aunque yo crecí y ahora estoy mas grande y supongo que mas falta.

- Sii - dije sonriendo y saltando un poquito. Estoy emocionada, mucho tiempo sin salir con ella y estos últimos días lo pase con mis padres encerrada aquí. Bueno, de echo llegue hace poco y ir al restaurante del hotel no cuenta.

Escucho cuando me dice que vamos a ir al laberinto y yo nunca he estado en uno y tampoco creía ir a uno. Pues a mis papas les parece algo muy ''aburrido'' o raro pensándolo bien. Dejando de hablar de todo lo anterior, estoy muy feliz algo que no paro de repetir y tampoco se deja de notar en mi rostro - Yo nunca he ido a uno y pensaba que tampoco iba a ir. - dije jugando con mis manos.