Revenge {Vladimir}

Recuerdo del primer mensaje :

Los calabozos siempre han sido la parte que más me ha desagradado del hotel. Incluso muchas veces he pensado en sellar la entrada, puesto que no se han usado durante siglos. Sin embargo ahora me ofrecen algo que no puedo encontrar en ningún otro lado en todo París; discreción. Muy pocos conocen de la existencia de este lugar, y se encuentra completamente aislado del resto del hotel. Sólo hay una entrada, y una vez cerrada ni siquiera el ruido puede escapar. Es un lugar perfecto para lo que estoy dispuesto a hacer.

Desde que Mía me dijo quién era el responsable de haberla convertido, no he dejado de pensar en ese nombre: Vladimir Dragotsky. Jure que me vengaría del responsable de la transformación de mi hija, y ese día había llegado. Busque el nombre de Dragotzky en el registro el habitaciones del hotel, y una vez que sabía dónde se hospedaba le deje una carta. Nada muy dramático, solo las indicaciones para llegar al calabozo y un corto mensaje que decía que lo esperaba a la medianoche en el lugar. A esa hora muchos de los huéspedes estarían fuera del hotel, y los que se quedaran no se darían cuenta de lo que estaba pasando.

Una parte de mi me dice que estoy equivocado al hacer esto. Vengarme de él no volverá a Mia a la normalidad. Nada lo hará, por mucho que lo intente. Pero otra parte de mi está cansada de ser siempre el hombre tranquilo y reflexivo de siempre. Parte de mí solo quiere dejar salir los instintos de vampiro que he estado conteniendo por tantos años, desde la muerte de mi padre. Y es esa parte la que permito que me domine en estos momentos. En mi mente solo hay espacio para un pensamiento. -Él es el culpable de dañar a mi hija, y no viviré tranquilo hasta que pague por ello.- Y yo seré quien lo hará pagar, esta misma noche.

Me enfurecen sus palabras. Tiene razón en que será difícil que Mía lo olvide, pero esa no es lo que me irrita. Lo que me enfada es el hecho de que parece no importarle la razón por la que Mía lo recordará. Es como si se conformara con el hecho de saber que Mía siempre pensará en él, sin importar si es con amor o con odio. Pero a pesar de mi rabia veo una oportunidad en esto; al igual que antes si logro provocarlo lo suficiente se descuidará, lo que me dará una oportunidad. Tomo aire y elevo la voz, intentando cubrir toda la instancia. -Es verdad, he vivido poco según el estándar de los vampiros. Poco menos de siglo y medio. Pero si vivir más significa ser alguien como tú, entonces me alegro de ser joven-. Respiro nuevamente, recuperando el aliento antes de continuar. -¿No ves que tenía razón con lo que te dije al llegar aquí? Realmente no te importa Mía; te conformas solamente con ser un recuerdo, sin importar si este es bueno o malo. Te basta con que te recuerde como aquel que la convirtió, aunque eso le cause una pena y un dolor que ninguno puede imaginar. ¿Realmente eres tan patético para conformarte con eso?- Por suerte para mí, el eco no le permitirá ubicarme en medio de aquella negrura.

Me basta con el sonido de unas pisadas, el susurro de su ropa al moverse, para lograr ubicarlo. Me muevo lo más rápido que puedo, para alcanzarlo antes de que pueda reaccionar. Al parecer lo logré, porque cuando siento su presencia a mi lado aún no se ha movido. Lanzo un puñetazo a su estómago, y una sonrisa de satisfacción se forma en mis labios al escuchar como el aire abandona sus pulmones. Pero no puedo darle tiempo para reaccionar. Cuando se encorva debido al golpe lo agarro de la parte de atrás de sus ropas, y con todas mis fuerzas lo arrojo en la que creo es la dirección en la que se encuentra una de las puertas de las celdas. Escucho el sonido que hacen los barrotes cuando su cuerpo impacta con ellos. Comienzo a alejarme de mi posición, para que no pueda encontrarme. Nuevamente alzo la voz para provocarlo. -¿Lo ves? Realmente no vales la pena. Mía estará mucho mejor cuando te olvide y encuentre a alguien que si la merezca. No eres lo suficientemente bueno para ella, y jamás lo serás.-

No puedo mas que reírme de forma sarcástica e irónica con su argumento de no ser como yo - Eso nada tiene que ver con los años vividos Demian, no digo que seas un crío pero si me imagino que te faltan muchas cosas por experimentar, además no puedes comparar tu vida con la mia, 3 siglos de vivir entre guerras no son comparables a nada - digo de forma arrogante y algo amarga, pues no todo fue bueno evidentemente, aunque sea poco creíble hubieron contados humanos que significaron mas para mi que una bolsa de sangre y a los que me dolío perder en el camino. Cuando vuelve a tocar el tema de Mia me enfurece de sobre manera, él realmente insiste en saber lo que yo siento por su hija y eso no puede ser verdad, él no sabe lo que esa rubia necia pero hermosa es para mi, a pesar de que ella ya no me quiere cerca - No me conformo Demian, simplemente se que debo lidiar con las consecuencias de mis actos, con ella, por eso también se que no debes meterte en esto mas de lo que un padre debería. Ella me recordará como quiera hacerlo aunque yo me esfuerce en dejar un buen recuerdo en ella, pero no daré mi brazo a torcer tan fácil, luchare por ella siglos si es necesario, para que mi recuerdo sea algo grato para ella, sin importar lo que tú digas o hagas -

Siento que estoy perdiendo el control de nuevo, además el no poder orientarme en esta oscuridad es frustrante. Cuando menos lo pienso siento su presencia pero reacciono lento y recibo un golpe que saca el aire de mi cuerpo, justo antes de sentir barrotes golpeando mi espalda. Con un leve quejido con el que recupero el aire me levanto y siseo con odio, estoy comenzando a dejarme llevar por los sentimientos y no es nada inteligente pero no puedo evitarlo - ¡¡TÚ NO ERES NADIE PARA DECIR ESO!! - grito, dejando salir a mi parte no racional ni pensante, esa que me hizo ganar tantos enfrentamientos en los frentes bélicos. Intento orientarme y lo ataco, llendo de lleno en contra de su cuello.

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'Ataque' : 1

Ahora me explico el porqué de su fuerza; al parecer ha vivido más del doble que yo. Es verdad que hay muchas cosas en esta vida que puede que él haya experimentado y yo no, pero eso también aplica a él. Cree que su vida ha sido difícil, y puede que lo sea, pero eso no significa que la mía haya sido mejor. Alguien debe hacerle entender que no es un ser único ni especial, y creo que yo tendré ese honor. -Pobre de ti, que has tenido que sufrir durante 300 años. Para tu información no eres el único que ha tenido una vida difícil. Si te dieras el tiempo de ver más allá de tus narices te darías cuenta que tengo razón.- Si de algo me he dado cuenta es que Dragotzky es sumamente orgulloso y pagado de sí mismo, por lo atacarlo en ese punto puede que me dé la ventaja. No puedo evitar notar que en ese ámbito somos parecidos, y quien sabe, tal vez si mi vida hubiera sido diferente habría terminado como él. Cuando vuelve a hablar de Mía sus palabras me suenan a justificación. Es claro que no le gusta que juzgue sus sentimientos hacía ella, y es justamente por eso que lo hago. Sin embargo su respuesta también logra que me enfurezca; no necesito que nadie me diga cómo debo actuar como padre -Tú no eres nadie para decirme que puedo o no hacer por mis hijas, Dragotzky. Es cierto que tienen sus vidas propias en las que no me corresponde intervenir. Y puede que incluso si nada de esto hubiera pasado tu hubieras formado parte de esa vida. Pero esa opción ya quedó sepultada. Esto no se trata solamente de que lidies con las consecuencias de tus actos. No es tan simple.- Poco a poco levanto la voz, expresando parte de la ira que siento -¿Es que no lo entiendes? Tu recuerdo nunca será grato. Aunque lograras que Mía vuelva a sentir por ti lo mismo que en un comienzo, eso no borrara el dolor que le causaste. La transformaste; y peor aún, la usaste. Puede que sea verdad que finalmente te enamoraste, pero en un principio te acercaste a ella solo con el fin de apoderarte de este hotel, y eso no puedes negarlo. Esos recuerdos siempre estarán presentes como una espina enterrada en su corazón, y lo sabes.-

Cuando escucho su grito me doy cuenta que tuve éxito. Su parte racional quedo atrás, dando rienda suelta a sus instintos. Soy consciente de que es un riesgo, en ese estado nada evitará que me mate si logra alcanzarme; pero al mismo tiempo gracias a eso sé que tengo la ventaja. Puede que eso le haya servido contra seres más débiles, pero conmigo no será así.  Me quedo quieto, intentando identificar de donde vienen sus pisadas. Si logra atraparme todo se acabará para mí, pero si logro atraparlo desprevenido puedo voltear las cosas a mi favor. Solo espero haber estado en lo correcto al pensar que si dejaba salir su lado salvaje, también se volvería más descuidado. Es hora de comprobar si estoy en lo cierto o no.

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'Defensa' : 6

- No digo que haya estado sufriendo todos mis años de vida, eso sería demasiado para cualquiera, pero lo que si digo es que he visto mas cosas que tú, por simple probabilidad - digo de forma seca, sin querer profundizar en ese asunto pues he visto mas muerte y desolación de la que debería. No es que quiera dar una clase de excusa a mi comportamiento aunque también.

Realmente no quería ser mas cruel y bajo con lo que puedo llegar a decirle pero creo que esta colmando mi poca paciencia muy rápido - Puedo meterme cuando tiene que ver con Mia. Sabes muy bien que ahora ella tiene un lazo mas fuerte conmigo que contigo, no creí necesario recordarte eso. Y será solo ella la que decida si me quiere o no en su vida - digo apretando los puños, mi ira me esta consumiendo, puedo sentirlo - ¡MALDITA SEA! Eso no es cierto, yo jamás la utilice, en ningún momento lo hice y aunque el plan original era chantajearte de alguna forma no tenía ni idea de como hacerlo. La pude haber usado y no lo hice, desde el principio - digo exasperado, aunque concuerdo en eso con él pero no se lo haré saber. Aún así me duele el entender que tiene toda la razón y que quizás Mia jamás me perdone, que me odie tanto que no pueda amarme de nuevo, eso acabará con mi vida, lo se muy bien, pero no me quedaré de brazos cruzados, buscaré que me de una segunda oportunidad, que me deje mostrarle que en verdad la amo y que es lo mas preciado que tengo, que es mas importante para mi que mi propio clan.

La ira nubla evidentemente mis sentidos y él logra esquivarme o yo fallo, no o se muy bien, lo único que se es que estoy contra una pared, siseando antes de voltearme en busca de él.

Puede que tenga razón, aunque solo en parte. Es verdad que por el hecho de haber vivido más puede que haya pasado por situaciones complejas; pero la cantidad no es lo importante. Lo que de verdad importa es como lo han afectado, y por lo que veo no ha sufrido mucho en su vida; al menos no parece estar acostumbrado a la perdida de alguien querido. No digo nada para responderle, no tiene por qué enterarse de mi vida, y a mí no me interesa saber de la suya.

Sus palabras me golpean en lo más profundo, provocando que toda la rabia en mi interior explote. Parece que mis palabras le dieron donde más le duele, a juzgar por su tono de voz; pero él logró hacer lo mismo conmigo. Soy consciente de que ahora su lazo con Mía es más fuerte que el que yo tengo con ella, pero eso es algo que simplemente no puedo asumir. ¿Cómo es posible que alguien me arrebate a mi hija tan fácilmente? No estoy dispuesto a arrojar por la borda todos los años que he pasado criando y cuidando a Mía, y se lo hago saber. -¡NO TE ATREVAS A DECIR ESO! Sé que ahora estas unido a Mía por un lazo de creador-neófito. Pero créeme cuando te digo que tu relación con Mía solo llegará a eso. Después de lo que has hecho, no permitiré que te acerques a ella.- En parte es por odio lo que le digo, pero en el fondo también siento miedo. Dado que él la convirtió, no sé qué pasará si llegan a verse de nuevo; y no estoy dispuesto a asumir ese riesgo. Y tampoco puedo dejar que él se dé cuenta que temo lo que pueda pasar, podría aprovecharse de esa debilidad, y eso podría costarme caro.

Logro detectar su presencia justo a tiempo para esquivarlo; un segundo más tarde y no sé qué habría sido de mí. Pero no puedo darle tiempo a reaccionar. Escucho el siseo que emite por la ira, y me lanzo de inmediato sobre el lugar del que parece emanar el sonido.

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'Ataque' : 3

Por fin, luego de escuchar como me provoca y me lastima el ego y el corazón hablando de cosas que no sabe y otras cosas en las que de hecho tiene razón pero no lo admitiré, por fin encuentro un punto débil en él, ese punto con el que es fácil hacerlo rabiar pues el dominio en nuestra raza es algo muy fuerte, ya sea sobre lugares o sobre las personas que mas queremos, en el caso de Demian es obvio que sus hijas son su punto mas débil, justo como pensé pero hasta ahora noto de qué forma precisa es la que lo hiere en verdad - Te repito Demian... no eres ya nadie para mandar sobre la vida de Mia y si dentro de ella sigue algún resquicio, por pequeño que sea, de amor por mi voy a aprovecharlo para que me acepte de vuelta, ella es mas que una neófita para mi y hasta tú lo sabes, puedes sentirlo ¿no es así? - pregunto con una sonrisa algo presuntuosa, pues no miento, algo más me une a Mia y es evidente a los ojos de quienes nos veían juntos antes.

Mi ataque fallido me pesa pues estoy tan molesto que uso toda mi fuerza cuando lo ataco, no debo cansarme, no se hasta que punto llegaremos pues fácilmente puede maratarme y dejar mi cadaver pudriendose en este sitio, sin pena alguna, lo cual sería algo penoso para mi gran ego. Me encuentro ligeramente desubicado pero intento estar alerta a sus movimientos, debo lograr salir de esta pues solo muerto me alejarán de Mia, inclusive si hablamos de su propio padre.

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'Defensa' : 3

Lo que dice me enfurece y me hiere en partes iguales. Al parecer el busca lo mismo que yo; lograr enfurecerme hasta perder el control, y al mismo tiempo hacerme daño. Intento reprimir la ira que siento en mi interior, pues no quiero darle la satisfacción de que sepa que lo que dice me afecta. Tengo un éxito a medias, pues mis palabras, aunque más calmadas, van impregnadas de odia y rechazo. -No me interesa como veas tú a Mía. Por mí podrías jurar que dejarás tu vida de vampiro atrás, y aun así no te permitiría acercarte a mi hija. Ya te lo dije antes; no importa lo que hagas,  jamás borrarás el dolor que la causaste. Y no permitiré que vuelvas a hacerlo Sé que tiene razón cuando dice que su lazo con Mía es más que el que tendría con una simple neófita. Puedo notarlo tanto en las acciones de Mía como en las reacciones que él ha tenido desde que estamos aquí adentro. Pero no estoy dispuesto a permitirle volver a acercarse a Mía, no mientras exista la posibilidad de que vuelva a hacerle daño.

No sé como pero ha logrado evitarme. No sé si es porque se está acostumbrando a la oscuridad del lugar o fue un error mío. Espero que sea lo segundo, puesto que si se está adaptando al terreno significa que perderé una de las ventajas con las que cuento. Pero no tengo mucho tiempo para preocuparme por esto ni para ofuscarme por haber fallado. Necesito orientarme rápidamente para evitar que me salte encima. Dado que dejó salir su ira, cualquier descuido podría significar mi fin.